Educación emocional

Este jueves y viernes pasados asistí a las "IV Jornadas de Formación Docente en Igualdad de Género" en Granada. Realmente ha merecido la pena, pues me han aportado nuevos conocimientos, resuelto dudas, hemos intercambiado experiencias, ampliado contactos... y lo más interesante y novedoso: hemos creado una asociación llamada DEGENA, de la que hablaré en otra entrada.

Voy a hacer un resumen de la conferencia inaugural "Educación Emocional. Educación para el bienestar individual y social", impartida por Mª del Mar González Rodríguez, psicóloga y profesora del departamento Psicología Evolutiva y de la Educación de la universidad de Sevilla.

En una investigación sobre "Emociones básicas y género" se encontró:

• En bebés de 3 a 6 meses se tolera la cólera en los niños y se desaprueba en las niñas.
• Se admite más la tristeza y se consuela más a las niñas, y a los niños se les distrae más.
• Ante una prueba en la que se presentaba un muñeco que salía de repente y bruscamente de una caja, el mismo comportamiento se interpretó de diferente manera según el sexo: en las niñas como miedo, y en los niños como ira.
• Se sonríe más y se muestra mayor expresividad con las niñas.

Estas conclusiones son muy reveladoras, sobre todo cuando pensamos que, a pesar de educar de igual manera a hija e hijo, muestran comportamientos femeninos la niña y masculinos el niño. Quízás no seamos conscientes de nuestra forma de relacionarnos con ellos y con ellas.

Mandatos de género femeninos (Lagarde, 1999; Rebollo, 2004):

1. Mujer: ser para otros. Cuidadoras y responsables del bienestar ajeno.
   
2. Mujer: ser incompleto. Necesitadas de un hombre para completar su identidad, y necesidad del amor como motivo vital nuclear.
   
3. Mujer: ser inferior y vulnerable. Éxito y fortaleza incompatibles con la condición femenina.
   
4. Mujer: ser madre. Maternidad como colofón de la identidad femenina.
   
5. Mujer: ser bella y atractiva. Para la aceptación social. Definida externamente.

Consecuencias de los mandatos de género femenino:

1. Si lo cumplen, se olvidan de sí mismas. Si no lo cumplen, sentimiento de culpa.
2. Baja autoestima (se sienten inadecuadas sin pareja), vulnerabilidad, dependencia, se facilita la subordinación. Si deciden transgredir el mandato de ser incompletas, culpa ("eres una egoísta").
3. Por definición, baja autoestima. Quienes lo transgreden, son fuertes o tienen éxito pueden sentir vergüenza, y lo evitan ocultando su identidad (si ganan mayor sueldo que sus parejas, si sacan mejores notas que los chicos...).

Malestares: Transtornos de ansiedad, depresión.

Mandatos masculinos (Bonino, 2000):

1. Hombre: ser no mujer. Superior, fuerte, invulnerable.
   
2. Hombre: ser importante. Tener éxito, despertar admiración.
   
3. Hombre: ser autosuficiente. Individualidad, confianza en sí mismos.
   
4. Hombre: ser agresivo y audaz. Coraje, violencia para resolver conflictos.
   
5. Hombre: ser que no cuestiona el orden establecido. Apego a las jerarquías.
   

Consecuencias de los mandatos masculinos:

1. Invulnerabilidad. Bloqueo de expresiones de vulnerabilidad (tristeza, miedo). Si las muestra, vergüenza, sentimiento de inadecuación.
   
2. Éxito. Si hay desajustes con estas expectativas, vergüenza, inadecuación.
   
3. Agresividad, audacia. Resolución violenta de los conflictos, comportamientos de riesgo.
   

Malestares: Síndrome "pérdida del norte", hipermasculinidad, homofobia, abusos de poder, violencia de género, conducta temeraria.

Anuncio de repsol música de James Horner y poema de Rudyard Kipling

Nos presenta este vídeo con un poema de Kipling, detrás del cual se encuentran todos los mandatos masculinos.

Mª del Mar aconseja al profesorado ser buenos modelos de desarrollo emocional:

• Mostrar interés por los estados emocionales del alumnado.
• Reconocer y expresar los propios sentimientos.
• Incluir en preocupaciones explícitas los conflictos emocionales del alumnado.
• Modelar estrategias eficaces y adaptativas del control emocional.
• Respeto por la diversidad del alumnado.

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